16 octubre, 2006

Dulce fin de semana II

La verdad es que teneis razon. La miel es muy empalagosa. Dulce, empalagosa... y lo que es peor... indigesta para según que cosas.

Hace tiempo hable del tema con una amiga. Fue una de esas conversaciones que llevan a unas cosas, llevan a otras, y cuando te quieres dar cuenta, estas en una situación en la que no te imaginarias.

La cuestión es que una tarde de verano, hara cosa de cuatro... mmmm... cinco años, me fui a merendar a casa de mi amiga. Era verano, estabamos libres, y empezamos a tocar el tema de los condimentos alimentarios.

Yo, por aquella epoca, estaba convencido de que la miel realmente era el mejor de los condimentos. Creia que debido a su untuosidad te obligaba a repetir constantemente una y otra vez a pasar la lengua por el mismo sitio, cosa que era muy agradable.

Despues de un tira y afloja, al final decidimos probarlo.

Asi, porque si. (Vale, porque si no... llevabamos todo el verano tonteando con rolletes). Ella me miro con unos ojos picaros, de esos que hacen arder, y saqueamos la cocina con todo aquello que se nos ocurrio que podia servir.

Empezamos con la miel. Con una dosificador de miel, lo fui extendiendo por sus pechos. Ella estaba tumbada, y el hilo de miel caia en un pezon, lo cubría, y dejaba un reguero hasta el otro pezon.

Cuando ya estaban cubiertos, comence a lamerlos. La miel siempre me ha gustado, así que a lametazos, comenzando desde una de las gotas que se deslizaban por sus pechos, hasta la parte contraria, mi lengua iba recorriendole mientras ella me miraba con una sonrisa.

Cuando termine con un pezón, comence por el otro. Este, viendo que ya comenzaba a empacharme, lo chupé, absorviendo toda la miel que pudiera de golpe, para acabar cuanto antes. Ella gimió ante el chupetón, y sigió gimiendo mientras terminaba de limpiar con la lengua el resto de la miel.

Realmente, cuando acabe, lo que mas me apetecia era un vaso de agua, y aunque la nota que puso ella a la sensación que producia fue bastante alta, por mi parte sabia que no podria hacerlo muchas veces mas.

Ella probó entonces con la nata. Con un tubo de esos que ya viene montada, hizo un camino que comenzaba en mis pezones y bajaba hasta mi polla, cubriendola completamente. Y comenzó a lamerla, tragandosela a medida que la iba recogiendo con su lengua. Cuando llegó a mi miembro, se la metió completamente en la boca, expandiendo con la mano lo que quedaba, para luego ir acariciandome mientras recogía los ultimos restos.

Me gusto mucho, pero la nota tampoco fue muy alta. La razón es que la nata fue solo una excusa para que ella lamiera con un sabor dulce en la boca. Desde mi punto de vista, los lametones no habian cambiado sustancialmente. No habia tenido que dedicarse mas a ellos, sino que con una simple lamida ya lo limpiaba.

Llego el turno al chocolate. Denso. La verdad es que a mi no me apetecia demasiado, despues del empacho con la miel, asi que no lo vi con demasiadas ganas. Sin embargo, ella se extendió unas cuantas cucharadas, dejando que resbalara por el coño.

Comence a lamerlo con timidez. El sabor del chocolate me llegó a traves de la lengua, y poco a poco fui recogiendolo con mas ganas. Intente recogerlo, pero descubrí que no podia. Alli donde comenzaba a chupar, a lamer, a oler, sabia y olia a chocolate. Además, con los lametones mi amiga estaba poniendose cada vez mas caliente, y sus jugos se mezclaban con los del chocolate, consiguiendo que cualquier rincon que pudiera alcanzar tuviera un apetecible sabor dulzón. Cada vez tenia mas ganas de absorver hasta la ultima gota, pero no se terminaba.

Absorvia. Lamia. Chupaba. Comenzaba desde el clitoris, y bajaba hasta abajo. Subia por entre los labios, y bajaba intentando alcanzar con la lengua la parte mas profunda de su coño. Comence a olvidarme de ella, y solo podia pensar continuar lamiendo mientras siguiera sabiendo a chocolate.

Llego un momento en el que el chocolate, mis saliva y sus jugos se mezclaban, y se deslizaban hasta llegar a la silla. Y yo no podia dejar de chupar. Y cuando creia que ya estaba a punto de eliminar todo el sabor... no te como se corria, apretando mi cabeza con sus muslos.

Fue entonces cuando ella probó con el chocolate. Me lo extendio por la polla, y comenzo a lamer. Libre de las humedades que tenia ella, en mi el chocolate permanecia mas denso, y su lengua recorria mi ombligo, mi miembro, los rincones que la piel guarda entre sus dobleces, la parte inferior del glande y hasta los testiculos. Yo notaba la lengua, y aunque sabia que lo que buscaba era lo mismo que acababa de buscar yo hacia escasos momentos, quitar y lamer todo el chocolate, no hacia mas que disfrutar de esa lengua vivaz e inquisidora que me recorria con ganas. Y como no, me corri. Y entonces, los restos del chocolate, mi corrida y su saliva se juntaron y cayeron al suelo.

Nos miramos. Sonreimos.

Y le pusimos un nueve al chocolate.

Porque el diez... nunca os imaginariais que es el diez.

Un beso y un guiño complice,
vuestro morbólogo

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo q está claro q te pone es q tu semen caiga al suelo, así q las tragonas..no se no se...jejejej
Besos y thanks por el coment

Mi rincon secreto dijo...

Apinupgirl:
Las tragonas me encantan. Solo de pensarlo me estoy poniendo...
Pero cuando no pasa, no pasa, y si a alguien no le apetece, no le voy a obligar a lo contrario :-)

Anónimo dijo...

Uisss, delicioso post, sobre todo el final, aquí me llaman chocohólica por mi adicción al chocolate... ummm... chocolate... ¿Ves? Ya me están entrando ganas, y después de lo que has contando se me junta el hambre con las ganas de comer... ¡si es que así no se puede!

Besotes yakis

Mi rincon secreto dijo...

Txiquilla:
Jajajaja :-D
Eso esta muy bien. Ves... ahora, entre tu comentario y el de Apinupgirl, voy a estar todo el dia pensando en otras cosas... XD
Un comentario mas así, y ya me veo buscando un sitio tranquilo y apartado XD

Anónimo dijo...

Ahora no me lo puedo quitar de la cabeza... chocolate caliente sobre un torso desnudo...

Por cierto, ¿qué haces a estas horas despierto? Lo mío es normal, aquí son las 11 de la noche, pero allí...

Besotes yankis

Anónimo dijo...

Ves lo del chocolate me parece más apto para el sexo.

Anónimo dijo...

Me has hecho recordar una tarde, en un hotelito de Madrid...él, yo y dos botellas de batido de yogurt de fresa y plátano...

Anónimo dijo...

puffffff!!!! Chocolate :S debo d ser una de las pocas chicas q no se mueren por el chocolate, es mas derretido no me gusta.

Nada tendré que esperar a q se le da el 10 a ver si esa opción m gusta mas XD

Anónimo dijo...

bufffffffffff chocolate y sexo k mezcla mas rica

besos

Mi rincon secreto dijo...

Txiquilla:
Mmmmm... pues imaginate lamerlo XD
Y aqui eran las siete y media de la mañana. Tenia que ir a trabajar mas tarde de lo normal.. pero levantado estaba igual que siempre :-D

Amaranta:
Se que vas a sentir sorpresa cuando te diga el 10 :-)

Lucia:
Guau... esa historia me la tienes que contar :-D

{Explo}:
Toma ejemplo de Lucia ;-)

pkñaja:
Verdad? :-)